domingo, 26 de junio de 2016

Sermones de santos, 35: los apóstoles Pedro y Pablo

        Y parece que el profeta Zacarías previó en espíritu esta misma gloria de los apóstoles, a los que él dice con otra semejanza que son dos olivos, que suministran continuamente aceite a la lámpara de la Iglesia, para que muestren la luz a los que yacen en las tinieblas y en la sombra de la muerte (Sal 106, 10). Así dice, en efecto: Y volvió el ángel que hablaba conmigo, y me despertó, como a un hombre a quien se le despierta de su sueño. Y díjome: ¿Qué es lo que ves? Yo veo, respondí, aparecer un candelero todo de oro, que tiene encima una lámpara, y siete lamparillas, y dos olivas encima de él, una a la derecha de la lámpara, otra a su izquierda (Za 4, 1-3).


Fray Luis de Granada, Obras Completas t. XLI, F.U.E. Madrid 2004 p. 268-271

Traducción Donato González-Reviriego

Sermones de santos, 34: San Pedro

        Habiendo, pues, preguntado el Señor que opinión tenían los discípulos sobre él, Pedro, trascendiendo las cosas corporales y elevándose por encima de la condición de la naturaleza humana, confiesa en Cristo la gloria de la divinidad, porque no miró a la sola sustancia de carne y sangre.

Fray Luis de Granada, Obras Completas t. XLI, F.U.E. Madrid 2004 p. 246-247

Traducción Donato González-Reviriego

sábado, 18 de junio de 2016

Ruta Jacobea del buque 'Hespérides''

El Buque de Investigación Oceanográfica ‘Hespérides’ regresa a Cartagena tras finalizar su Campaña Antártica
Se han realizado 18 proyectos de investigación desde que el buque saliera de Cartagena el 6 de noviembre de 2015:  05 de mayo de 2016
El Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) ‘Hespérides’ ha atracado hoy al muelle de “La Curra” en Cartagena (Murcia) tras participar en la XXIX Campaña Antártica Española. En esta campaña se han llevado a cabo 18 proyectos de investigación financiados por el Ministerio de Economía y Competitividad.
A su llegada, el buque ha sido recibido por la secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, Carmen Vela, por el Almirante de Acción Marítima, vicealmirante Manuel de la Puente, por el delegado del Gobierno en Murcia, Antonio Sánchez-Solís, y familiares y amigos de los miembros de la dotación.
El ‘Hespérides’ ha estado fuera 182 días y ha acogido el desarrollo de seis proyectos científicos, cinco de los cuales se realizaron en aguas antárticas. Durante este periodo, han embarcado más de 200 técnicos y científicos de 16 países, de los cuales 51 han desarrollado sus proyectos a bordo.
Campaña Antártica Española
El Ministerio de Economía y Competitividad colabora tanto en los gastos de campaña en las bases y en el BIO ‘Hespérides’, como en la financiación de los proyectos de investigación que se desarrollan durante la campaña.
Las entidades operativas participantes en estas actividades son la Unidad de Tecnología Marina, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que gestiona la Base Antártica Española Juan Carlos I en la Isla Livingston y coordina la logística general de la campaña antártica; el Ejército de Tierra, que gestiona la Base Antártica Española Gabriel de Castilla en la Isla Decepción y la Armada, que opera el BIO ‘Hespérides’.
Final de la ruta marítima del Camino de Santiago de la Antártida
Como colofón, el ‘Hespérides’, antes de su atraque en el Arsenal Militar de Cartagena y en coordinación con la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago, al objeto de marcar la llegada a Cartagena como puerto final de la ruta marítima del Camino de Santiago de la Antártida, ha efectuado un saludo frente a la dársena del Apóstol Santiago en el puerto de Cartagena.
El saludo consistió en la realización de una pasada frente a la dársena del Apóstol Santiago en Santa Lucía al tiempo que se ondeaba el banderín de la peregrinación y se hacían sonar pitadas largas. Dicha dársena recibe el nombre del Apóstol Santiago ya que según la tradición, el Apóstol desembarcó en ella en su primera visita a la Península Ibérica.
Características del buque
El ‘Hespérides’ es el único buque español diseñado para efectuar investigación científica multidisciplinar en todos los mares y océanos del planeta, lo que hará posible el adecuado desarrollo de las investigaciones científicas previstas. Cuenta con una dotación 55 hombres y mujeres, bajo el  mando del capitán de fragata Julio Albaladejo, y tiene capacidad para alojar hasta 37 científicos y técnicos
Fuente: La Armada Española (Internet)
************************************************

        Dirigiéndose al cristiano lector hace esta confesión, señalando el objetivo de su obra: Pues viendo yo que en esta edad se abren tantas puertas entre los gentiles para la difusión de la fe, porque me cupiese alguna partecilla en esta obra de tanto merecimiento, quise al fin de este libro (Introducción del símbolo de la fe), servir con mi cornadillo escribiendo este breve tratado en que se declara el modo que se podrá tener en enseñar y persuadir nuestra santa fe a los infieles…estando yo arrinconado en una celda, quiero enseñar de la manera que se podrán proponer los misterios de nuestra fe a los que traen las manos en la masa, y a quien la divina gracia había enseñado lo que la especulación, sólo, sin experiencia no alcanza. Mas con todo eso tomé atrevimiento para lo dicho, porque en nuestra ‘Introducción del símbolo’ y en el ‘Sumario’ de ella, se trata de los principales misterios de nuestra fe que han de ser aplicados a los catecúmenos o a los infieles.

Urbano Alonso del Campo, Vida y obra de fray Luis de Granada, S. Esteban 2005, p. 182-183

sábado, 11 de junio de 2016

Francisco de la Torre García

        También ofrece Luis de Granada suficientes elementos al estudiarlo por sus valores semánticos, que en muchas ocasiones se unen a su estilo y, mezclados ambos aspectos, contribuyen a enriquecer su expresión y hacen más atractiva la comprensión de un texto, al tiempo que se nos plantean preguntas sobre el contenido y la intención comunicativa del autor.
        El uso del verbo ATALAYAR (Fray Luis de Granada, Addiciones al Memorial de la vida christiana, Madrid, Manuel Fernández 1730, p. 80) nos empuja a la reflexión. Veamos el texto:
        Por tanto conviene que cada uno vele diligentemente sobre la guarda de sí mesmo con tantos ojos, como nos representan los animales de Ezechiel, atalayándose por todas partes, y examinando con diligencia todas sus obras...
        Es un verbo más propio del lenguaje bélico, aunque adaptado aquí al propósito religioso, entendiendo el ejercicio espiritual como una lucha para desasirse de las pasiones  y perfeccionarse en el amor a Dios. En el texto citado, Fray Luis de Granada une ATALAYAR con EXAMINAR y efectúa una traslación semántica desde la más frecuente significación de ATALAYAR (ver desde lo alto) a un plano interior (verse por dentro). Ambos gerundios caminan en el texto precedidos por el presente de subjuntivo del verbo VELAR que ayuda a completar el sentido y significación de los dos, a la vez que esta triangulación verbal como rasgo de estado amplía el campo significativo. Semántica y estilo quedan unidos. Asimismo, no es infrecuente encontrar compleméntándose estilo, semántica y usos lingüísticos, que, a veces, unidos en el discurso, confieren a los textos dimensiones de expresividad y belleza ni previstas ni esperadas.
        El verbo catar (Op. cit. p.191) lo usa con el sentido que se le daba en la Edad Media: MIRAR. Sin embargo, cuando usa el verbo mirar no suele tener el significado de ver algo fijándose con atención como en el lenguaje actual, sino como fórmula de advertencia, que también hoy empleamos: Mira que está dando golpes a la puerta: este dulcísimo Señor te llama
      Otro ejemplo, en frase consecutiva: Mira, pues, como aquel Señor de todo lo criado (Op. cit. p. 438).

Francisco de la Torre García, Semántica y usos lingüísticos en Fray Luis;VARIOS, Fray Luis de Granada, un escritor contemporáneo, Ediciones del Orto, Madrid 2009, p.41-42


Mª Idalina Resina Rodrigues

        En 1561, un núcleo de breves consideraciones sobre los novísimos y sobre los beneficios acompaña la Vita Christi, publicada entonces. Iniciando un itinerario que las obras posteriores vendrán a confirmar, Fray Luis de Granada indica ahora estas reflexiones como incentivos para el amor de Dios y para el deseo de servirlo. A pesar de ser repartida en ocho órdenes de beneficios, y no en diez, la materia, elogiada por su variedad, se explaya en un texto que resume el del ejercicio de oración mental de la Guía de Pecadores. Las informaciones finales sobre el método de meditar cada beneficio tampoco son originales.

Grandes Escritores «Prémios Cervantes e Camões» (Fot. Instituto Estudos Ibéricos e Ibero-Americanos)

Mª Idalina Resina Rodrigues, Fray Luis de Granada y la literatura de espiritualidad en Portugal, Universidad Pontificia de Salamanca y F.U.E., Madrid 1988, p. 226

jueves, 9 de junio de 2016

Fray Luis de Granada, el escritor de la Naturaleza

        Fray Luis es un cantor enamorado de la naturaleza. Un recreador literario y místico de la hermosura contemplada y vivida con ternura de niño y veneración de anciano. Y desde la embriaguez del paisaje se levanta, en vuelo de águila, hasta Dios, Hacedor de todo lo creado:...¿qué es todo ese mundo visible, exclamará Fray Luis entusiasmado, sino un grande y maravilloso libro que vos, Señor, escribisteis y ofrecisteis a los ojos de todas las naciones, así de griegos como de bárbaros, así de sabios como de ignorantes, para que en él estudiasen todos, y conociesen quién vos érades? ¿Qué serán luego todas las criaturas de este mundo, tan hermosas y acabadas, sino como unas letras quebradas e iluminadas, que declaran el primor y la sabiduría de su autor? ¿Qué serán todas estas criaturas sino predicadoras de su hacedor, testigos de su nobleza, espejos de su hermosura, anunciadoras de su gloria, despertadoras de nuestra pereza, estímulos de nuestro amor, y condenadoras de nuestra ingratitud (Obras, V, 36).
        Fray Luis cuando escribe, ora; y ora contemplando la naturaleza. En su contemplación del paisaje hay un diálogo interior que se hace eco y cae como cascada refrescante y limpia a través de su pluma. Su espíritu reposa en la contemplación de las obras de Dios en el mundo, y el alma asciende de la creación a Dios y retorna desde la luz y el agua viva del Creador a la naturaleza, como espejo de su hermosura, derramándose sobre los hombres, objeto privilegiado del amor tierno y cercano de Dios.

La Alhambra (Fot. Hotel Vincci&News)

Urbano Alonso del Campo, Vida y obra de Fray Luis de Granada, ed. San Esteban, Salamanca 2005, p. 305

miércoles, 8 de junio de 2016

El gusano que hila la seda



        Porque comenzando por el gusano que hila la seda, ¿no es cosa de grande admiración que un gusanillo tan pequeño hile una hilaza tan sutil y tan prima, que todas las artes y ingenios humanos nunca hasta hoy la hayan podido imitar? ¿No es maravilla haber dado el Criador facultad a este animalillo para dar materia a toda la lozanía del mundo, que es al terciopelo, al tafetán, al damasco, al carmesí altibajo, para vestir los nobles, los grandes señores, los reyes y emperadores, y diferenciarlos con la hermosura de este hábito del otro pueblo menudo?.

Fray Luis de Granada, Obras Completas, t. IX, F. U. E., Madrid 1996 p. 187



                                                             ********************
Seda en Murcia: siglo VIII

Las fuentes históricas confirman que la llegada de la seda a Occidente se produjo a través de Constantinopla, bajo el mandato de Justiniano, en su empeño por llevar este tejido a todos los confines de su imperio.

En España se cree que se introdujo por el sureste peninsular, pero no fue hasta la llegada de los árabes, en el siglo VIII, cuando se desarrolló su producción, especialmente a partir de la fundación de Murcia.

Desde sus orígenes, las sedas españolas alcanzaron un gran prestigio internacional, destacando entre ellas la murciana, con sus ricas telas Wasy, mezcla de seda y oro.

Existe una laguna documental para los siglos XI, XII y XIII, aunque se tiene constancia de que continuó una importante producción por las referencias a la excelente calidad de los tejidos murcianos.

En la época cristiana, la seda perdió paulatinamente su importancia y en su lugar se desarrolló la ganadería. Sin embargo, en el siglo XIV se plantaron las primeras semillas de moreras blancas, y se produjo un nuevo e importante florecimiento, con un lugar destacado para la huerta de Murcia.

Auge en Murcia: siglo XVII

Dos judíos murcianos expulsados por los Reyes Católicos (Antonio de Grimaldo y Carlos Peralta) fueron los que, al volver de su 'exilio' italiano, importaron las técnicas con las que la industria sedera alcanzó un auge insospechado en la huerta murciana, provocando una avalancha de agricultores que comenzaron a cultivar morera en sus tierras.

Los capullos eran cuidados en el interior de las casas por mujeres y niños a un coste mínimo. Así, se aumentó considerablemente la producción y se extendió el uso del tejido entre las poblaciones más humildes.

Numerosos huertanos intentaban evadir los impuestos por cosechar seda vendiéndola de forma clandestina, por lo que en 1610 se terminó de construir un edificio denominado Contraste de la Seda, situado en la plaza de Santa Catalina de Murcia. Su objetivo era pesar y controlar la producción cosechada anualmente, aunque no se consiguieron frenar estas actividades clandestinas.

A comienzos del siglo XVI se generalizó la costumbre de dar limosnas a la Iglesia en forma de capullos de seda, gracias a los cuales se emprendieron grandes obras humanitarias y arquitectónicas, como el Seminario de San Fulgencio o el Puente Viejo de Murcia durante el siglo XVIII..

Durante el S.XVII se desarrolló principalmente en Murcia una importante actividad artesanal en torno a la seda: torcedores, tejedores, cordoneros, toqueros, pasamaneros y tintoreros habitaban en el casco urbano y principalmente en los barrios de San Antolín, San Andrés y San Miguel.

El centro de negocio de la seda estaba instalado en el núcleo urbano, principalmente en la plaza Santa Catalina, donde se reunían periódicamente mercaderes, corredores y productores de seda para cerrar los tratos comerciales.

Publicado por: 'Región de Murcia Digital'

Las abejas en la Región de Murcia

No todos los héroes llevan capa    

FRANCISCO AMORÓS Pedro Rodríguez se levanta, como cada día, a las 6 de la mañana. Ha adquirido un compromiso con la sociedad y no puede faltar a su cita casi diaria. Está deseando ver a sus protegidas. ¿Estarán bien? ¿Les habrá faltado comida? Las mismas preguntas cada día, el mismo nudo en la boca del estómago mientras conduce su jeep por los caminos rurales.Sabe que de él dependen muchas vidas. Y no nos referimos sólo a las de sus diminutas amigas. En parte, tiene en su mano preservar el ciclo de la naturaleza que a su vez es el que nos asegura la supervivencia a los humanos. Por ir al grano, Pedro salva vidas. Pero no es bombero, médico o policía. Pedro es apicultor.En los últimos años ha muerto entre el 30% y el 40% de la población mundial de abejas. Estas diminutas amigas son los únicos insectos multitareas conocidos: mientras elaboran su miel son capaces de producir de forma indirecta el 25% de los cultivos más nutritivos e interesantes para nuestra dieta, así como de ciertos cultivos forrajeros necesarios para la producción de carne y lácteos.

Todo esto sin olvidar que, junto con otros insectos, las abejas son las responsables de la polinización de un 90% de la flora silvestre. En este sentido, casi podríamos afirmar que las abejas son las responsables hasta del aire que respiramos.

La importancia de las abejas en la supervivencia humana es vital. A pesar de ello nos empeñamos en hacerles la vida imposible con el empleo de insecticidas, la intensificación de la agricultura, el cambio climático y otros inconvenientes más. Para combatir con estos y otros males, las abejillas cuentan desde tiempos inmemoriales con un fiel defensor olvidado por la sociedad. Se trata de un héroe sin capa, pero con sombrero y redecilla, que lucha por la supervivencia de cada colmena, haga frío o calor, llueva o nieve, sea día laborable o festivo. En este sentido, podríamos considerar a los apicultores los verdaderos salvadores del mundo. Son especialistas en medicina, nutrición, química, meteorología, economía, botánica, biología, pero también dedicados ebanistas, pintores, ferreteros, y sobre todo, amantísimos padres de estos seres tan importantes para nosotros.

Nadie como ellos se preocupa por evitar las enfermedades producidas por diferentes parásitos, de que estén bien alimentadas en periodos de escasez de flores o su transporte a zonas donde la floración todavía perdura. Nadie como ellos está permanentemente alerta de los avances que surgen para combatir los nuevos peligros que, día a día, el ser humano insiste en colocar para terminar con la supervivencia de las abejas y otros insectos. Todo, para devolvérnoslo de forma desinteresada a través de la supervivencia de nuestra especie.

Por todo esto, el beneficio de los apicultores está muy por encima de la producción de miel. Se estima que los beneficios económicos globales por su acción indirecta sobre la polinización ascienden a un total de 265.ooo millones de euros en productividad. Por supuesto, como en cualquier valoración de un servicio ecológico, si éste se ve comprometido, su valor tiende a infinito al resultar irremplazable.

Hoy 20 de mayo, celebramos el Día Mundial de la Abeja. Sin duda, es el momento idóneo para reconocer a Pedro y a los veinte millones de apicultores repartidos por todo el mundo, su dedicación desinteresada, su servicio a la sociedad y su amor incondicional. Quizás algún día sea lo que nuestros hijos quieran ser de mayores.

Publicado en 'La Opinión' de Murcia (20-5-2016)

************************

        Escogido el rey, tratan de edificar sus casas, y primeramente dan un betumen a todas las paredes de la casa, que es la colmena, hecho de hierbas muy amargas, porque como saben que es muy cobdiciada la obra que han de hacer, de muchos animalillos, como son avispas, arañas, ranas, golondrinas, serpientes y hormigas, quiérenle poner este ofensivo delante, para que, exasperadas con esta primera amargura, desistan de su hurto.                                                      

Fray Luis de Granada, Obras Completas, t. IX, F. U. E., Madrid 1996 p. 191

lunes, 6 de junio de 2016

Para retraer a los hombres del pecado

        Especialmente sabiendo que todo lo que en este mundo hizo, dijo, y padeció, todo fue por causar en nuestros corazones aborrecimiento y apartamiento del pecado. Por matar el pecado, murió; y por echarle clavos en pies y manos, se dejó enclavar en la cruz. Pues ¿por qué quieres tú hacer vanos todos los trabajos y sudores de Cristo, pues te quieres quedar en aquella misma servidumbre de que él con su sangre te libró? ¿Cómo no temblarás de sólo el nombre de pecado, pues ves a Dios hacer tan grandes extremos por destruirlo? ¿Qué más pudiera Dios hacer para retraer a los hombres de pecar, que ponérseles delante atravesado en una cruz?. 

Fray Luis de Granada, Guía de pecadores, ed. Molino 'Colecc. Literatura clásica', Buenos Aires 1942, p. 45

Libro procedente de la Biblioteca de don Antero García Martínez, presbítero, miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, y de la Real Academia de la Historia, de Madrid.

sábado, 4 de junio de 2016

Sermones de tiempo 139: Corpus

        Habiendo, pues, preguntado el Señor que opinión tenían los discípulos sobre él, Pedro, trascendiendo las cosas corporales y elevándose por encima de la condición de la naturaleza humana, confiesa en Cristo la gloria de la divinidad, porque no miró a la sola sustancia de carne y sangre.


Fray Luis de Granada, Obras Completas t. XLI, F.U.E. Madrid 2004 p. 246-247

Sermones de tiempo 139: Corpus Christi

        Mas de esta misma incomparable dulzura y vehementísima suavidad nace cierta avidez por comer ese pan. ¿Cómo es posible que el alma pura y piadosa, desposada con Cristo en espirituales nupcias, no esté ansiosa por tomar lo que a ella tanto motivo de felicidad, de amor, y de gozo purísimo le proporciona? Un hambre que en las almas purificadas es tan grande, que un solo día que no puedan tomar la comunión les parece que son muchos.

Luis de Granada, Obras Completas, Sermones del Corpus, t. XXXV , F. U. E., Madrid 2002 p. 250-251

Transcripción y traducción de Ricardo Alarcón Buendia