De las otras
obras de misericordia espirituales dice el Apóstol: Los que estamos más firmes debemos
sufrir los defectos de los mas flacos y no estar contentos y satisfechos de nosotros
mismos, antes cada uno trabaje de agradar a su
prójimo en el bien para edificarlo y aprovecharle a imitación de Cristo,
que no tuvo cuenta con su contentamiento, sino con nuestro remedio[1]. Y
escribiendo a los de Éfeso, dice así: Sed unos con otros benignos y
misericordiosos, perdonándóos unos a otros, así como Dios os perdonó por Cristo[2]. Y en
otro lugar: Sed imitadores de Dios como hijos muy amados, y vivid en amor así
como Cristo nos amó[3]. Y después de esto: Como
escogidos y amados de Dios vestíos de entrañas de misericordia, de benignidad,
de humildad, de modestia, de paciencia, sufriéndóos unos a otros y perdonándóos,
si alguien tiene de vosotros alguna queja: así como el Señor os perdonó, así
vosotros también perdonad[4]. Y
escribiendo a los de Tesalónica, dice así: Castigad a los inquietos, consolad a
los pusilánimes, recibid a los flacos y sed sufridos para con todos[5]. Éstas
y otras maneras de obras de misericordia nos encomienda san Pablo, el cual se
hizo todo para todos por hacer salvos a todos y, resplandeciendo en todo género
de obras de misericordia, nos dejó un clarísimo ejemplo de esta virtud. Y
quienquiera que quisiere saber cuál sea el fin y suma de todas las obras de
misericordia, sepa que no es otro que aquél que en muy pocas palabras comprende
el mismo Apóstol diciendo: Llevad los unos las cargas de los otros, y así cumpliréis
la ley de Cristo[6]: la cual dice el mismo Apóstol
que consiste en la caridad[7].
Finalmente, a cada uno de nosotros está mandado que tenga cargo de su prójimo,
el cual mandamiento interpretó el Salvador diciendo: Todas las cosas que queréis
que hagan los hombres con vosotros, hacedlas vosotros con ellos: porque ésta es
la ley y los profetas[8].
Fray Luis de Granada, Obras Completas, t. XXI, F.U.E.
Madrid, 1999, p. 78-81 (Transcripción del portugués de José Luis de Almeida
Monteiro; Traducción al español de Justo Cuervo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario