lunes, 21 de abril de 2014

La fe en la resurrección de Cristo

Los apóstoles, al ver a Cristo resucitado, comprendieron la importancia capital de la fe en su resurrección, y por eso era la verdad fundamental que predicaban, como dice san Lucas: con gran firmeza daban los apóstoles testimonio de la resurrección de Jesucristo[1]. Además, cuando trataron de elegir a Matías para cubrir el puesto del traidor Judas, previamente pusieron esa condición: Ahora, conviene que de todos los que nos han acompañado todo el tiempo que el Señor Jesús vivió entre nosotros, desde el bautismo de Juan hasta su muerte, uno de ellos sea testigo con nosotros de su resurrección[2]. Y san Pablo, ¿qué dogma de nuestra fe predicaba con más frecuencia e inculcaba con mayor vehemencia? Así, queriendo Festo, gobernador de Judea, informar al rey Agripa de la actividad de san Pablo, le contó: trata de ciertas cuestiones de la religión de los judíos, y de cierto Jesús, difunto, de quien afirma que vive[3].
Estos testimonios son la augusta prueba de que la resurrección de Cristo fue el dogma quicial que los apóstoles predicaban.

Fray Luis de Granada, Obras Completas, t. XXXII, F.U.E., Madrid 2001 p. 176-7




[1] Hch 4, 33
[2] Hch 1, 21-22
[3] Cf. Hch 25, 19

No hay comentarios:

Publicar un comentario